El Reiki, una técnica energética conocida por su capacidad para equilibrar cuerpo y mente, ha generado un creciente interés en el ámbito científico. Pero, ¿cómo se estudia algo que no podemos ver ni medir directamente? Aquí te invito a un recorrido por las investigaciones que están llevando esta práctica milenaria al laboratorio.

¿Cómo se investiga algo como el Reiki?
El método científico requiere rigor, creatividad y, por supuesto, recursos. Para que un proyecto de investigación reciba financiamiento, debe presentar un diseño sólido, incluyendo objetivos claros, métodos reproducibles y un equipo capacitado. Una vez completado, los resultados son publicados en revistas científicas tras un proceso de revisión exhaustivo.
Si te preguntas dónde encontrar estudios sobre Reiki, una herramienta útil es NCBI (https://www.ncbi.nlm.nih.gov/), que recopila artículos de revistas indexadas. Al buscar “Reiki”, aparecen miles de artículos que van desde experimentos en bacterias y ratones hasta estudios clínicos en humanos.
Resultados Fascinantes
Uno de los primeros estudios realizados en la temática del Reiki fue publicado en 1989 por Wendy Wezter. Este experimento evaluó cómo la sintonización de Reiki nivel 1 afectaba los niveles de hemoglobina y hematocrito en humanos. En el grupo de personas que recibieron la sintonización, los valores mostraron cambios significativos tras la práctica de Reiki, mientras que el grupo control que no recibió Reiki permaneció inalterado. Aunque este estudio no descartó del todo el efecto placebo, este trabajo abrió la puerta a futuras investigaciones.
Desde entonces, se han realizado numerosos estudios. Algunos de los hallazgos más interesantes incluyen:
- Efectos en pacientes oncológicos: Reducción del dolor, mejora en la calidad de vida y disminución de la fatiga (Potter, 2013).
- Impacto en niños y familias: Beneficios como relajación, alivio del dolor y mayor confort emocional (Mothersill et al., 2012).
- Mejoras en parámetros físicos: En pacientes postquirúrgicos, Reiki ayudó a reducir la presión arterial y el ritmo cardíaco (Vandervaart et al., 2011).
Un meta-análisis realizado por McManus en 2017 revisó 13 estudios sobre Reiki. Ocho de ellos mostraron que el Reiki es más efectivo que el placebo, mientras que los demás tuvieron resultados menos concluyentes debido a limitaciones estadísticas. La conclusión general: El Reiki es una terapia complementaria segura que activa el sistema nervioso parasimpático, promoviendo la sanación del cuerpo y la mente.
Ciencia y Reiki: Un Camino en Construcción.
Aunque el número de estudios científicos sobre Reiki sigue siendo limitado, los resultados disponibles sugieren un potencial prometedor. Es importante recordar que cada investigación aporta una pieza al rompecabezas, y que el camino hacia la comprensión completa de esta práctica aún está en construcción.
El Reiki, al igual que la ciencia, tiene la capacidad de abrirnos a nuevas formas de entendernos a nosotros mismos y al mundo. Puede que aún no tengamos todas las respuestas, pero la combinación de curiosidad y compromiso nos llevará más cerca de ellas.
¿Te atreves a explorar este fascinante cruce entre energía y evidencia?
Aunque actualmente la tecnología no está a la altura para medir el Reiki en términos científicos, esto no significa que no podamos percibirlo. El reiki se manifiesta de muchas formas: a través cambios comprobables en nujestro cuerpo y de profundas experiencias espirituales que trascienden lo conocido.
Es probable que, en el futuro, la ciencia alcance un punto en el que pueda medir y explicar este tipo de energía. Hasta entonces, nos apoyamos en los testimonios de quienes han experimentado sus beneficios.
¿Tienes alguna historia o testimonio con el reiki que te gustaría compartir?
Profesora en Mindfulness, Licenciada en Biología Molecular y Doctora en Ciencias Biológicas. Mi vida ha sido un camino donde la ciencia y la espiritualidad se encontraron de manera natural y poderosa.
Desde muy chica sentí una enorme curiosidad por comprender cómo funcionan las cosas. Cuando tenía 14 años y descubrí la estructura de las proteínas, supe que había encontrado una verdadera pasión. Esa fascinación me llevó a elegir la biología molecular como mi vocación y a dedicarme durante años a la investigación científica.
Sin embargo, aún antes de ese descubrimiento, viví una experiencia que marcaría otro rumbo fundamental en mi vida. Junto a mi hermana, de forma casi lúdica, experimentamos por primera vez una meditación guiada con un viejo casete de mi mamá. Lo que sentí en aquel momento fue tan profundo, tan transformador, que desde entonces la meditación se convirtió en una herramienta esencial para acompañarme en mis estudios, desafíos y búsquedas personales.
Mi camino no se detuvo ahí. Siempre me ha apasionado explorar nuevas técnicas de meditación y, al mismo tiempo, comprender cómo y por qué funcionan. La ciencia me sigue maravillando con sus investigaciones sobre los efectos de la meditación, la neuroplasticidad, los ritmos cerebrales, los beneficios fisiológicos y los nuevos desarrollos en sonido y bienestar. Creo profundamente que la percepción espiritual y la comprensión científica pueden unirse para ampliar nuestra experiencia humana y ofrecernos nuevas posibilidades de transformación.
Así nace Recreo Consciente, la convergencia de mis dos pasiones: la meditación y el estudio del cuerpo humano. A través de este proyecto descubrí otra vocación que me llena el alma: la enseñanza. Disfruto profundamente al compartir con otros las experiencias de meditación y la belleza de los procesos que nos conducen al equilibrio, la calma y la presencia.
Con todo este conocimiento decidí fundar El Mayor Bien, una página donde distintos autores comparten conocimientos de crecimiento personal y espiritualidad, para que los lectores encuentren múltiples herramientas de bienestar que puedan aplicar en su vida diaria.
También soy la creadora del canal de YouTube El Mayor Bien – Meditaciones, donde comparto prácticas de Recreo Consciente para acompañarte en tu rutina diaria y ayudarte a experimentar los beneficios de la meditación de manera accesible y constante.
Podés contactarte conmigo a través de mis redes sociales y trabajar conmigo en clases de meditación o en sesiones de Reiki personalizadas. Será un honor acompañarte en tu camino hacia el bienestar.